SI YO FUERA PALOMA...
El embajador de Israel en EEUU sostiene que su país merece el Nobel de la Paz por la "contención" con la que se están empleando en Palestina. No descartemos nada. En este mundo cruel y mentireiro se puede dislocar la realidad hasta convertir en pacifistas a estados que actúan como sanguinarios asesinos. El embajador se jacta de la infinita misericordia demostrada por su gobierno al haber masacrado, solamente, a más de ochocientos civiles palestinos (aunque la cifra sube cada día). Y no le falta algo de razón. A la vista de los hechos, Israel podría exterminar a toda la población de Gaza, uno por uno, antes de que la comunidad internacional diga ¡Jesús!. Los cuerpos destrozados de los niños palestinos y el reciente ataque a una escuela refugio de Naciones Unidas en Beit Hanún son algunos de los méritos que aportan para obtener el reconocido galardón. ¿Qué mayor muestra de piedad que acabar con el sufrimiento de las aterrorizadas criaturas calcinando definitivamente sus menudos cuerpecillos? Si yo fuera la paloma de la paz estaría tan conmovida por estos bondadosos actos que volaría, cual kamikaze columbino, a incrustar mi afilado pico en los ojos de estos cínicos. Mientras desatan un infierno contra el pueblo palestino reclaman la admiración del mudo entero. Porque pueden. Porque se sienten respaldados por otros civilizados estados que apenas condenan, cuando no apoyan sin complejos como Estados Unidos, su criminal proceder. Todos somos cómplices. Luego, sería justo que la candidatura al Nobel fuera compartida por toda la impasible comunidad internacional. No hacer nada de nada, también provoca muertos. Y también tiene mérito. Porque hacen falta buenas tragaderas para justificar el sistemático genocidio de los palestinos con el endeble argumento de la defensa propia. Tanta jeta de cemento bien merece una medalla por lo menos. Pero quizás, el Nobel de la Paz no sea lo más indicado. Sugiero crear otro más acorde con los candidatos. "El premio al asesinato múltiple e impune" o el de " Genocidas sin fronteras" por ejemplo. Pero mancomunado.Porque mirar para otro lado no nos hace mejores a los verdugos. Solo demuestra que todos podemos ser igual de miserables. ¡Ay, si yo fuera paloma...!
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