AZNAR, ESE MACHO
Que la política de este país adolece de valores como la honestidad, la transparencia o la vocación de servicio público es un hecho que, de ser tan asumido por la ciudadanía, se ha normalizado hasta el esperpento institucional. Lo grotesco e inmoral del comportamiento de quienes rigen el destino de nuestros pueblos no puede deberse a otra razón que a la de ser un reflejo de la sociedad que, entre todos, hemos ayudado a construir. Las formas, sobre todo las de la apariencia física, prevalecen sobre los fondos y, en ocasiones, tratan de esconder los auténticos transfondos que motivan a los individuos. He ahí el ejemplo del ex-presidente Aznar. La privilegiada forma física de don Jose Mª que tanto elogia el periódico italiano Il Corriere de la Sera , y que bien podría ser portada de Interviú en ventajosa competencia con el posado veraniego de la Obregón, servirá para lubricar las torridas siestas veraniegas de las féminas, y algún que otro caballero, de la derecha nacional. Este macho español de erótico y sugerente bigote, capaz de hacer 2.000 abdominales de una sentada y de correr a la velocidad de un puma, trata de suplir con la disciplina atlética, la inerte flacidez del único músculo que no se dedica a ejercitar. ¿A que lo adivinan? No hombre, no me sean mal pensados, que yo solo hablaba de su cerebro. Esa materia viscosa y gris que, de tanto ponerla al servicio del cártel neocon, se ha ido sunsiendo hasta convertirse en un órgano residual que la selección natural ha decidido eliminar por superfluo e innecesario. Es por eso que el apolíneo Aznar no duda en liderar a los escépticos del cambio climático o en burlarse de las recomendaciones sobre el alcohol que dicta la DGT sin que se le desmelene su impoluta cabellera.! Pero qué más da!. En este mundo frívolo y superficial del que todos somos parte contratante, tiran más dos potentes pectorales que un discurso coherente. !Señor, qué asco de vida!
Publicada en diario Público el 1 de agosto del 2009
1 comentario
seguidora y fan -