Y DIOS SE HIZO HOMBRE

¿Por qué eligió Dios encarnarse en un hombre y no en una mujer? Hubiera sido perfecto. Nadie como las mujeres puede hablar de opresión, sometimiento y secuestro de sus derechos. El Dios católico, pero también otros de distintos credos, es decididamente machista. Por alguna razón que desconozco debe temernos, a pesar de ser obra de su creación. Por eso, ha desarrollado un entramado de religiones que controlen a esta anomalía necesaria que es el género femenino. Nuestra libertad, nuestra sexualidad y hasta nuestra alma, son cuestionadas y férreamente gestionadas en todos los cultos. En teoría, gracias a la lucha por la igualdad de géneros, una mujer puede ser presidenta de una nación, astronauta o camionera pero nunca, bajo ningún concepto exceptuando  a la iglesia anglicana, puede ser sacerdotisa o papisa. ¿Son las religiones más misógenas que clasistas o racistas? Probablemente no. Sin embargo, solo con respecto a las mujeres, existen reglas explicitas que no se manifiestan tan abiertamente contra otros colectivos. El poder que les otorga supervisar la familia, el aborto o la moral sexual ha contribuido históricamente a mantener la dominación masculina. Esos lazos blancos que salpican las procesiones de estos días, no son una protesta contra la injusticia social, el hambre o los horrores de los múltiples conflictos armados que padecemos en el Planeta. Solo pretenden añadir otro eslabón más a la cadena que nos mantiene sujetas al feudalismo ideológico del macho. Si el dios de los cristianos quería ponerse a prueba no debería solo haber escogido un origen humilde. Debería haber nacido hembra. Pero claro, el calvario que le esperaba bajo esta condición hubiera sido mucho más espantoso. Por eso, apartó de él ese amargo cáliz y optó por algo menos complicado y doloroso: nacer hombre !Ah, pero eso sí! De una mujer que no utilizó su "sucia" sexualidad para concebirlo.

Publicado en el Periódico e Aragón el 16 de abril del 2009